lunes, 15 de febrero de 2010

Una loca chica... Cap.8

Después de haber despertado de aquel extraño sueño, lloré por un rato no muy largo pero a mi me parecía casi eterno… Ese dolor era inexplicable, incluso para mi ni yo lo podía entender. Me quede pensando unos minutos en la cama, era las 4 A.m. aproximadamente, sin darme cuenta me quedé dormida… de nuevo.


Despierta dormilona- en sueño escuche una voz conocida, muy conocida…


Me desperté de golpe al escuchar esto. Abrí los ojos y volteé rápidamente para ver quien era. Veía un poco borroso, así que me empecé a desperezar… Estaba una chica sentada a un lado de mi cama con una de mis almohadas en la mano, con la cual se tapaba la cara, vestía una remera mangas largas rosa fuerte encima un saquito liviano negro con pequeños detalles en blanco, unos jeans oscuros y unos converse grises.

La examiné de pies a cabeza, no podía ver su rostro, seguía tapado con la almohada de color amarillo pálido, solo podía ver unos hermosos rizos de color rojizo.


Me quedé mirándola y escuché una risa – Asi que eres tu!- me acerqué a ella y le quité la almohada de su rostro.

Era Violet, con su piel blanca un poco bronceada y su largo cabello rojizo, sus ojos cafés tenían un brillo diferente.

¿Ya te olvidaste de mi?- sonrío... Me senté automáticamente a su lado- Por supuesto que no, es imposible olvidarte – ella me abrazó con fuerza, nos quedamos así por unos minutos.

Nos soltamos, me sonrió y yo la imité, empezó a rebuscar algo en su enorme bolso.


No te imaginas cuanto te extrañe Violet! – dije mientras daba pequeños saltos.


Levantó la mirada – Yo también, pasaba todas las noches llorando por ti…


Oh… ¡lágrimas francesas, que tierno!- dije sarcásticamente


Si, han cambiado mucho las cosas por aquí parece…- al decir eso se acercó a la ventana de mi cuarto que daba a la calle, y empezó a observar el paisaje… yo de un saltó me levante de la cama y me acerqué a ella, puse mi mano en su hombro y dije- Así es…


Se quedó mirando la ventada por un tiempo, hasta que le interrumpí y dije- Disculpa Vio… voy a cambiarme, espérame un rato y vuelvo, ponte cómoda.. – lo último casi lo grité desde el baño…

Tomé una ducha y cuando volví del baño… Violet se encontraba mirando mi closet.

Caminé silenciosamente hasta ella…- ¿Qué haces?- pregunté


No, nada… solo curioseando un poco jaja- Vi como quitaba una blusa que jamás use de un cajón – Es hermosa ¿no?


Emm… si, lo es – dije mirando de reojo la blusa púrpura que tenía entre sus manos.


Anda... Vamos, pruébatela!- dijo mientras estiraba su brazo para pasarme la blusa

Te va a quedar perfecta


Di un gran suspiro- Esta bien – dije con desganas..


Después de unos minutos salí del baño… me puse la maldita blusa púrpura que nunca había usado y unos jeans negros. ¿ Ya eres feliz? Le dije y simulando que posaba.


WOW! Si, lo soy!... estas hermosa, te queda súper en serio – dijo con entusiasmo.. y sin darme cuenta me tomo una foto.


Oye! Bórrala ahora… - dije y corrí, y me abalance sobre ella- dame, lo voy a eliminar – dije algo enojada.


No no no... Eso jamás! – dijo mientras corría de mi – sigue soñando niñita jaja


Eres malvada – dije mientras reíamos muy fuerte – Bórrala ahora o veras… encima que me puse esta bendita blusa púrpura que una loca chica pelirroja me obligó a usar!


JA-JA Admite que te gusta… – seguía corriendo de un lado para otro, su rojo cabello estaba todo alborotado.. Tienes que verte al espejo- repuse...


En ese instante alguien llamo a mi puerta y era…¿ Papá?

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AAH! Aquí esta el otro capitulo, perdon por tardar.. creo que no podré publicar rápido aparentemente

pero bueno, espero que comprendan.... jaja

los quiero! gracias por seguir..



lunes, 1 de febrero de 2010

Sueño... Cap. 7

Habían pasado muchos días desde que vi a Thomas por última vez. Pasaban y pasaban los días, y no lo veía en el colegio ni en ningún otro lugar. Había desaparecido.

Era increíble pero tenía que admitirlo… Lo extrañaba y mucho. Con él sentía que podía olvidarme de todos los problemas.


Me quede pensando en el casi toda la noche, hasta que me quede dormida…

El ocupaba mi cabeza hasta en mis sueños. Empecé a soñar… En el sueño me encontraba en un salón grande blanco, con unos grandes ventanales que tenían cortinas blancas un poco amarillentas y los muebles eran del mismo tono. Derrepente sentí que alguien me agarraba la cintura- “No te muevas”- dijo esa persona, no pude ver su rostro.

Empecé a temblar, no podía controlarme, de tanto temblar perdí la estabilidad y caí al suelo.

Solo veía unas sombras que se movían a mí alrededor, iban de un lado para otro. Pero una voz me sacó de mi delirio- “Llévenla”- dijo la voz con tono sombrío.

Una ráfaga de viento entro por unos de los ventanales e hizo casi temblar el enorme salón

Levante la cabeza para ver de quien era la voz y era de… Thomas.

Estaba parado a un poco más de 2 metros de mi, sin expresión alguna en su rostro. Su voz era aterciopelada y seria. Nunca lo había visto ni escuchado así


De pronto sentí unas manos que me tomaban por los brazos y me jalaban, yo me resistía y trataba de luchar pero no era lo suficientemente fuerte para poder liberarme. Pero aún así no deje de luchar…

THOMAS!- mi grito ahogado retumbo por todo el salón.

Él estaba caminando lenta y tranquilamente hasta una enorme puerta de cristal, volteó al oír mi grito, me miro un rato largo… Su mirada reflejaba dolor e impotencia. No dijo nada.

Hizo una mueca de dolor. Dio media vuelta y salió por la puerta de cristal, podía ver su figura a través de la transparencia de la puerta.

Sentía que mis ojos ardían de nuevo, sentía un dolor de cabeza muy fuerte, cerré los ojos con fuerza y apreté los dientes. Sentía un vibración extraña en todo mi cuerpo… Abrí los ojos con violencia.

Sentía como las manos que me jalaban me soltaban despacio. Mi piel tenía un brillo extraño, me concentré en la figura de Thomas…

No lo hagas! – una voz desconocida me grito y en pocos minutos me encontraba inconciente en los brazos de un extraño…


Me desperté de golpe y empecé a gritar, no sabía porque lo hacia, las lágrimas comenzaron a salir sin control de mis ojos. No comprendía que me pasaba, ese sueño era rarísimo y parecía muy real… tan real que sentía el dolor, si, estaba gritando de dolor. Pero, ¿Por qué sentía dolor? Era tan solo un sueño, pero sentía como si fuera que realmente ocurrió, el dolor era real.


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Perdon por haber tardado tanto.. es que no tenía casi tiempo para publicar.. pero ahora si!

He regresado! jajaa espero que les guste..

Publicaré dentro de poco.. lo prometo! :)

GRACIAS POR SEGUIR


P.D: queremos más seguidores!